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dilluns, 21 de juliol del 2008

¿Y? La Habitación Roja

PRIMERA LEY DE LA TERMODINÁMICA. El incremento de la energía interna de un sistema termodinámico es igual a la diferencia entre la cantidad de calor transferida a un sistema y el trabajo realizado por el sistema a sus alrededores. El primer principio de la termodinámica es una ley empírica que no puede demostrarse teóricamente.
SEGUNDA LEY DE LA TERMODINÁMICA. En una forma concisa, la cantidad de entropía (desorden) de cualquier sistema aislado termodinámicamente tiende a incrementarse con el tiempo, hasta alcanzar un valor máximo. Más sencillamente, cuando una parte de un sistema cerrado interacciona con otra parte, la energía tiende a dividirse por igual, hasta que el sistema alcanza un equilibrio térmico.
TERCERA LEY DE LA TERMODINÁMICA. Es imposible alcanzar una temperatura igual al cero absoluto (-273,15 Cº) mediante un número finito de procesos físicos. Puede formularse también como que a medida que un sistema dado se aproxima al cero absoluto, su entropía tiende a un valor constante específico. No es una noción exigida por la Termodinámica clásica, así que es probablemente inapropiado tratarlo de “ley”.


Le hace enfermar solo el pensar que no todo es igual y en el asiento de detrás es difícil tener el control, descubrir, descifrar. Ojos cerrados a la cruda realidad, que es verse caer. Me atrapará la soledad. Dura es la verdad. cuando no la quieres ver, es como una tempestad. Solía escribir cartas para olvidar, recitar poemas, frágil como cristal. Qué le pasa a mi mundo, pensó, y nadie le respondió, pues si a nadie le importa las preguntas sin respuesta, sólo hay respuestas aprendidas. Que gente tan aburrida!

Le hace romper, romper a llorar, el imaginar que ya no puede cambiar todo lo que pasó. Lo que ocurrió es tan sólo pasado, algo que ya murió, algo que nunca ardió y que nunca verá pues no habrá otra oportunidad. Dejó de preguntar, naufragando en su mar, el pensamiento se le va. Solía escribir cartas para olvidar, recitar poemas, frágil como cristal. Qué le pasa a mi mundo, pensó, y nadie le respondió, pues si a nadie le importa las preguntas sin respuesta, sólo hay respuestas aprendidas. Que gente tan aburrida!

(ESCOLTA-LA)