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dimarts, 31 de gener del 2012

GOOD NIGHT. The Beatles

Leo en diversos medios de información de hoy que durante la próxima noche un asteroide llamado Eros 433 se acercará nada más y nada menos que a 26,7 millones de kilómetros de la Tierra. Si bien este cuerpo celeste tarda aproximadamente 21 meses en completar su órbita alrededor del sol, no volverá a ser visible desde nuestro planeta hasta el año 2056. Será, por tanto, una ocasión excelente para subir a la azotea de casa y usar nuestro nuevo telescopio para localizarlo en el firmamento y seguir su trayectoria, eso sí, siempre que las condiciones meteorológicas lo permitan. El objeto podrá ser visible a partir de las 4 de la madrugada y transitará entre las constelaciones de Leo, Sextans e Hydra. Puede que la hora pudiera representar un inconveniente para efectuar la observación. No obstante, la ocasión sin duda merece sacrificar tiempo de sueño en pos de presenciar esta acontecimiento.

Y mientras leía sobre este evento astronómico me ha venido al pensamiento un fenómeno similar que pude comprobar a simple vista hace ya algunos años. Corría la Semana Santa de 1996. Un amigo y yo decidimos tomarnos juntos unos días de vacaciones. El plan consistía en conducir hasta Andorra y una vez allí visitar a una amiga que había encontrado trabajo de recepcionista en un hotel. También aprovecharíamos para hacer alguna excursión y conocer algo mejor aquel territorio. Así que nos montamos en el pequeño Suzuki Santana y nos dirigimos hacia el país de los Pirineos. Vivimos unas jornadas en que, a pesar de que al final no estuvimos todo lo activos que nos habíamos propuesto, conocimos gente interesante y nos reímos mucho.

Sin embargo, hubo un día en qué planeamos llegar hasta Llívia para almorzar. De manera que nos levantamos temprano, desayunamos a conciencia y nos metimos en el coche con dirección a l’Envalira. Fuimos durante todo el camino bordeando la frontera aunque sin adentrarnos en Francia. Pudimos disfrutar de unas vistas de gran belleza, paisajes que para mi eran totalmente desconocidos.

Al llegar a Llívia se puso a llover. Aparcamos el coche, anduvimos por entre las callejuelas y encontramos un lugar de nuestro agrado donde comer. No sabría decir si el almuerzo estuvo bien. Si que recuerdo que no dejaba de llover. Tomamos un café en otro local aguardando que descampase. Como eso no era así, y pensando en el camino de vuelta, tirando de prudencia acordamos volver a Andorra esta vez por el lado francés. El atardecer fue discurriendo y la lluvia por fin desapareció. Cuando se hizo de noche, las nubes se habían disipado casi por completo razón por la cual pudimos disfrutar de un cielo nocturno espectacular como pocas veces yo había visto y como pocas veces lo he vuelto a ver.

Entonces sucedió. En medio del firmamento conseguimos observar cómo nos seguía un cuerpo celeste que parecía un cometa. Lo mirábamos estupefactos. Incluso se podía ver a la cabellera. En aquel tiempo no existía Internet y es por eso que, hasta que llegamos al hotel dónde nos alojábamos y encendimos el televisor no supimos que se trataba del cometa Hyakutake.

Desde aquel momento intento estar al día de las efemérides astronómicas y por ese motivo hoy, de hecho esta madrugada, me despertaré, agarraré mi telescopio y subiré a la azotea para deleitarme con este espectáculo cósmico.

LLETRA
Now it's time to say good night. Good night Sleep tight. Now the sun turns out his light. Good night Sleep tight. Dream sweet dreams for me. Dream sweet dreams for you. Close your eyes and I'll close mine. Good night Sleep tight. Now the Moon begins to shine. Good night Sleep tight. Dream sweet dreams for me. Dream sweet dreams for you. Close your eyes and I'll close mine. Good night Sleep tight. Now the sun turns out his light. Good night Sleep tight. Dream sweet dreams for me. Dream sweet dreams for you. Good night Good night Everybody. Everybody, everywhere. Good night.

TRADUCCIÓ
Es hora de dar las buenas noches. Buenas noches, que duermas bien. Ahora el sol apaga su luz. Buenas noches, que duermas bien. Que tengas dulces sueños por mí. Que tengas dulces sueños para ti. Cierra los ojos y yo cerraré los míos. Buenas noches, que duermas bien. Ahora la luna empieza a brillar. Buenas noches, que duermas bien. Que tengas dulces sueños por mí. Que tengas dulces sueltos para ti. Cierra los ojos y yo cerraré los míos. Buenas noches, que duermas bien. Ahora el sol apaga su luz. Buenas noches, que duermas bien. Que tengas dulces sueltos por mí. Que tengas dulces sueltos para ti. Buenas noches, buenas noches a todos. A todos, en todas partes. Buenas noches.

dijous, 19 de gener del 2012

CANCIONES PARA EL TIEMPO Y LA DISTANCIA. Iván Ferreiro

En la confluencia de las calles Bruc y Diputació, (Besòs / montaña), existe un pequeño bar restaurante, cuyo nombre es Norte, al cual acudo con frecuencia muchas mañanas para desayunar. El espacio del local destinado a mesas apenas debe tener una superficie de unos 30 metros cuadrados. Sin embargo, gracias en parte a una sencilla decoración en la que el color blanco es protagonista indiscutible, y en parte a la exquisita acogida que se recibe desde el momento en que uno entra al establecimiento, cualquier posible prejuicio percibido desde el exterior se desvanece.
Para que la sensación de bienestar sea completa, suele sonar a un volumen discretísimo un hilo musical en el que predominan ritmos caribeños: ska y reggae, de manos gente como de The Specials, Desmond Dekker, Bob Marley, Toots and The Maytals, etc. De esta última banda, como ya es conocido, los legendarios Kortatu adaptaron el corte titulado Chatty, Chatty para crear el inolvidable Sarri, Sarri.
Hoy también me he acercado al Norte para tomar un café con leche. Sorprendentemente no había ningún otro cliente ni lo ha habido hasta que ha llegado la hora de volver a la oficina. Han sido veinte minutos de pura tranquilidad lapso de tiempo que, sobretodo en el centro de Barcelona, no tiene precio.
Ya en la calle, después de pagar mi consumición, justo cuando estaba a punto de cruzar, se ha parado una furgoneta de reparto junto a mi. El conductor llevaba la ventanilla bajada. He aguzado el oído para identificar los acordes de la canción que provenían del interior de la cabina del vehículo. Hacía tanto tiempo que no escuchaba este tema...


LLETRA
Perdí cientos de horas en buscar un lugar donde tocar el suelo y encontré dos mil palabras que guardar. Y vi toda mi vida alrededor. Canté cien escogidas al azar. Sonó como si ya existiera. Grité las que no me gustaban Y vi que sólo hablaba de los dos... Que sólo hablaba de los dos... Que sólo hablaba de los dos... Sumas y restas, demonios dentro de palabras. Tiemble la luna que llene el tedio de tu cama... Pensé que no me equivocaba y fui directo al centro del alud. Busqué donde siempre encontraba y vi que sólo hablaba de los dos... Quemé todos mis trajes de color. Brindé por el blanco y el negro. Noté lleno de arena el corazón. Y vi que hago canciones para ti... Sólo canciones para ti... Que van hablando de los dos... Grabé canciones para ti. Llegué después de algunos años y partí en el instante que llegué...