Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho. Una y otra vez. Así constantemente. Pero no hay mambo. Puedo caminar de manera sincopada y al compás de ese ritmo, pero esa no es la cuestión. ¿No lo adivináis? Obviamente, es muy sencillo: soy una araña y utilizo mis ocho patas para caminar. Con ellas puedo conseguir hazañas realmente sorprendentes. O, ¿acaso tú serías capaz de trepar por una pared vertical lisa, sin ningún tipo de relieve? Pues claro que no. Además soy capaz de segregar un finísimo y resistente hilo de seda con el que puedo desplazarme con tremenda gracilidad. Pero también tengo una sin igual habilidad tejedora gracias a la cual construyo estructuras planas y pegajosas a base de círculos concéntricos reforzados por filamentos rectos que los cruzan y que anclo en varios puntos intentando conseguir una orientación perpendicular al suelo.
¿Qué pretendo con esta actividad? Sencillamente, conseguir alimento. Algunas incautas moscas se posan en mi telaraña y a los pocos minutos ya son conscientes de que están condenadas. No obstante, mi menú incluye cualquier otro insecto poco precavido que caiga en mi trampa harmoniosa.
Hoy estoy contenta. He acabado una nueva telaraña en un rincón de la casa donde habito. Dos paredes y un techo, no necesito más para construirla. Sé, también, que en este día se instalan nuevos vecinos en este inmueble. Son humanos como tu. Nunca tuve problemas de convivencia con los hombres y no creo que a partir de ahora la cosa cambie. Entre vosotros parece ser que existe la creencia que encontrar una araña en un hogar nuevo en dónde vivir es sinónimo de buena suerte. Así que, ¿por qué temer nada?
He oído ruido de llaves. La puerta se ha abierto. Se oyen voces Decido, que voy a bajar sigilosamente hasta la mesa que tengo bajo mis patas para tener mejor perspectiva de la escena. Ellos son tres. Una mujer, un hombre y un chiquillo. No parece que el pequeño tenga más de cinco años.
Los adultos se desplazan por aquí y por allá. Hablan entre ellos, pero yo no les entiendo. Mientras tanto, el crío se acerca a la mesa donde me he posado y me ve. Nos miramos mutuamente. El chaval parece que se agacha a recoger alguna cosa del suelo. Qué majo que es, y como se ríe. En un instante, con extrema rapidez teniendo en cuanta su pequeño tamaño, se yergue y levanta su bracito. Sostiene un periódico con su mano. Todo se vuelve oscuro para mí. Es demasiado tarde para reaccionar. Mier…!!!
LLETRA
Ziggy played guitar, jamming good with Weird and Gilly and the Spiders from Mars. He played it left hand but made it too far: Became the special man, then we were Ziggy's band. Now Ziggy really sang, screwed up eyes and screwed down hairdo like some cat from Japan, He could lick 'em by smiling. He could leave 'em to hang. 'came on so loaded man, well hung and snow white tan. So where were the spiders, while the fly tried to break our balls with just the beer light to guide us. So we bitched about his fans and should we crush his sweet hands?
Ziggy played for time, jiving us that we were voodoo. The kid was just crass, he was the nazz with God given ass. He took it all too far but boy could he play guitar. Making love with his ego Ziggy sucked up into his mind. Like a leper messiah when the kids had killed the man I had to break up the band.
¿Qué pretendo con esta actividad? Sencillamente, conseguir alimento. Algunas incautas moscas se posan en mi telaraña y a los pocos minutos ya son conscientes de que están condenadas. No obstante, mi menú incluye cualquier otro insecto poco precavido que caiga en mi trampa harmoniosa.
Hoy estoy contenta. He acabado una nueva telaraña en un rincón de la casa donde habito. Dos paredes y un techo, no necesito más para construirla. Sé, también, que en este día se instalan nuevos vecinos en este inmueble. Son humanos como tu. Nunca tuve problemas de convivencia con los hombres y no creo que a partir de ahora la cosa cambie. Entre vosotros parece ser que existe la creencia que encontrar una araña en un hogar nuevo en dónde vivir es sinónimo de buena suerte. Así que, ¿por qué temer nada?
He oído ruido de llaves. La puerta se ha abierto. Se oyen voces Decido, que voy a bajar sigilosamente hasta la mesa que tengo bajo mis patas para tener mejor perspectiva de la escena. Ellos son tres. Una mujer, un hombre y un chiquillo. No parece que el pequeño tenga más de cinco años.
Los adultos se desplazan por aquí y por allá. Hablan entre ellos, pero yo no les entiendo. Mientras tanto, el crío se acerca a la mesa donde me he posado y me ve. Nos miramos mutuamente. El chaval parece que se agacha a recoger alguna cosa del suelo. Qué majo que es, y como se ríe. En un instante, con extrema rapidez teniendo en cuanta su pequeño tamaño, se yergue y levanta su bracito. Sostiene un periódico con su mano. Todo se vuelve oscuro para mí. Es demasiado tarde para reaccionar. Mier…!!!
LLETRA
Ziggy played guitar, jamming good with Weird and Gilly and the Spiders from Mars. He played it left hand but made it too far: Became the special man, then we were Ziggy's band. Now Ziggy really sang, screwed up eyes and screwed down hairdo like some cat from Japan, He could lick 'em by smiling. He could leave 'em to hang. 'came on so loaded man, well hung and snow white tan. So where were the spiders, while the fly tried to break our balls with just the beer light to guide us. So we bitched about his fans and should we crush his sweet hands?
Ziggy played for time, jiving us that we were voodoo. The kid was just crass, he was the nazz with God given ass. He took it all too far but boy could he play guitar. Making love with his ego Ziggy sucked up into his mind. Like a leper messiah when the kids had killed the man I had to break up the band.
TRADUCCIÓ
Ziggy tocaba la guitarra, improvisaba bien con Weird y Guilly y los “Spiders from Mars” (Arañas de Marte). Tocaba con la mano izquierda, pero llegó demasiado lejos. Se volvió el hombre especial, entonces éramos la banda de Ziggy. Ziggy cantaba realmente, con ojos y cabellos alocados como un gato de Japón. Podía lamerlos con una sonrisa, podía dejarlos colgados. Llegaron tan cargados, tío, bien dotados de blanca nieve bronceada. Entonces, ¿dónde estaban las Arañas cuando la mosca trató de rompernos las bolas? Sólo una cerveza suave para guiarnos. Entonces bastardeamos a sus fans, y ¿debemos aplastar sus manos suaves?
Ziggy tocó por un tiempo, parloteándonos que éramos Vudú. Los chicos eran insensibles, él era el puto amo (Nazaret) con Dios dándonos mierda. Llevó todo muy lejos, pero sí que sabía tocar la guitarra. Haciendo el amor con su ego Ziggy se aspiró sorbió todo el coco. Como un Mesías leproso cuando los chicos ya habían matado al hombre tuve que disolver la banda.